100 años de la tragedia del Titanic

06.12.2012 21:26

 

 

Hola, amantes de la sabiduría. Esta semana hablaremos de un tema especial. Hablaremos del Titanic y su famoso hundimiento, y es que el día 15 de abril del año en curso se cumplió un centenario de este impactante hecho.

Y es que en aquel tiempo el Titanic era el barco más grande y lujoso de pasajeros del mundo. El dichoso barquito empezó su viaje el día 10 de Abril de 1912 desde Inglaterra, con destino a Nueva York, haciendo varias paradas en el transcurso del viaje. Tenía 2227 personas. Había tres tipos de clases: alta, media y baja. Todo dependía del dinero del que tuvieras en las arcas. En aquel tiempo era un sueño para cualquier persona ir subido en este navío tan majestuoso, que era el mejor de la época. Además contaban con el capitán Smith, todo un veterano capitán, que como despedida de su trabajo, quería acabar a lo  grande, al timón del Titanic.

Todo iba bien. El barco iba a buena velocidad, la gente iba súper a gusto en el barco, todo les iba a pedir de boca, incluso hubo pasajeros que se atrevieron a decir: “Ni Dios sería capaz de hundir este barco”, prueba del exceso de confianza que tenían. Todo iba perfecto y sin novedad, hasta el día 13 de Abril, momento en que empezaron a llegar al Titanic señales de radio de que se aproximaban a una zona de icebergs. Sin embargo los mensajes no se tomaron nada en serio por los comandantes. A pesar de todo el clima se iba enfriando a medida que se acercaban a los bancos de Terranova, por lo que el capitán Smith decidió cambiar un poco el rumbo hacia el sur. Llevaban una velocidad de 22 nudos, que era bastante rápida. Entonces, el capitán pregunta a Bruce Ismay si la debía bajar, pero este se negó por que querían hacer el trayecto más rápido, para superar a todos. La última noche del 14 de Abril el Titanic navegaba por aguas tranquilas, pero el clima era helado, y había grandes icebergs, pero eran difíciles de ver por la oscuridad de la noche. Smith, en ese momento, vuelve a preguntar al jefe de la compañía, Bruce Smay, si podía bajar la velocidad, mas este se volvió a negar, por lo que Smith pide que se redoble la guardia en los mástiles.

Esa noche del 14 de Abril de 1912, Smith, ya cansado, se va a su camarote a eso de las 22:30 para descansar. A eso de las 11 y media de la noche, un  vigía avistó un señor iceberg a 500 metros, que tenía 30 metros de altura sobre el nivel del mar. Entonces el vigía llama a la cabina de mandos, y el oficial Murdoch al darse cuenta de la situación, intenta coger la sartén por el mango a su manera. Giró el timón todo a babor y tiró marcha atrás, lo que fue fatal. Al final, se evitó el choque frontal, pero el listo de Murdoch, viajó rápidamente a estribor, sin pensar siquiera que el iceberg se extendía por los costados debajo del nivel del mar. Así que al final el iceberg golpeó al coloso, a 5 metros de profundidad, abriendo 6 brechas de unos 100 metros, y dejando 5 compartimentos por donde entraba agua. Era la sentencia.

Entonces se llamó a varios carpinteros para que intentaran arreglar el buque, pero en ese momento predijeron lo que parecía imposible: el barco tardaría de 2 a 4 horas en hundirse. Lo gracioso es que había capacidad para 1178 personas en los botes, pero solo se salvaron 711 debido al exceso de confianza que tuvieron a un simple barco. Murieron 1500 personas; todo esto nos será familiar por las películas que recuerdan el hecho.

Esto fue poco más que el reflejo del exceso de confianza del hombre en sí mismo, hace que cometa errores que cuestan la vida de personas. Además, la ambición excesiva del hombre lo impulsa a cometer locuras. Hemos visto lo que hizo el presidente de la compañía del barco, que, aun a sabiendas de que había icebergs en la zona, no estuvo dispuesto a bajar la velocidad, solo para ser el más rápido. Este es uno de los muchos casos que muestra la poca cosa que es el hombre. Si por los gobiernos fuera... la humanidad estaría extinguida.